Un unicornio es una startup valorada en más de 1000 millones de dólares. En el mundo emprendedor, la madurez del ecosistema de un país suele medirse en la cantidad de unicornios que tiene. En este sentido, los países en Sudamérica que cuentan con un unicornio son 5: Argentina, Brasil, Colombia, Chile, y Uruguay. Sin embargo, esto no quiere decir que en el resto de los países de la región el ecosistema sea muy básico, pues si bien los unicornios nos pueden dar un indicador del avance del ecosistema en cada país, varios pasos son necesarios antes de lograr este hito.
En Bolivia ser emprendedor no es lo más sencillo. Falta de regulación amigable con los emprendedores, pocas oportunidades de financiamiento y un reducido número de programas que fomenten el emprendimiento, han ralentizado el proceso de conseguir nuestro primer unicornio. Sin embargo, en los últimos 3 años, distintos emprendimientos han logrado, a pesar de estas dificultades, colocar a Bolivia en el panorama latinoamericano de emprendimiento. Estos casos de éxito iniciales han despertado interés a nivel de financiamiento tanto dentro como fuera de Bolivia. Estas nuevas oportunidades de financiamiento abren paso a una nueva ola de startups, y esta nueva ola debería traer consigo más casos de éxito. Es así que ser emprendedor hoy en día en Bolivia no es lo más sencillo, pero día a día se hace un poco más fácil.
Para entender cómo ha mejorado el ecosistema emprendedor, debemos revisar un poco la historia de los emprendimientos bolivianos que están teniendo éxito en la región. Empecemos por los primeros casos de éxito. Tal vez de los primeros que nos viene a la cabeza es Ultracasas, un emprendimiento que ya ha levantado más de $2 millones en inversión extranjera y además ha logrado sustentabilidad. Ultracasa es, quizás hasta ahora, el único emprendimiento boliviano en lograr ambos méritos. Sin embargo, si hablamos de levantamiento de capital extranjero, existen otras startups que ya han caminado este sendero. DeltaX, la startup de logística, recientemente levantó $1 millones. Koban levantó $2.3 en su afán de proveer mejores servicios financieros a la región. Mobi atrajo $1.3 millones de inversión para revolucionar el sector de transporte. TuGerente, PasanaQ, e Izi son ejemplos de otras startups que levantaron menos de $1 millón y consiguieron inversores extranjeros que los apoyen en sus proyectos. Y ¿por qué es tan importante recibir inversión extranjera? Primero porque la inversión permite crecer un emprendimiento en etapa temprana, y segundo porque convencer a un inversor extranjero que tu emprendimiento tiene potencial de escalar y generar retornos al inversor, es una forma temprana de validación de la idea, el equipo y el proyecto.
Sin embargo, no solamente las startups que levantaron capital están ayudando a mejorar el ecosistema emprendedor boliviano, ni tampoco son las únicas formas de validar ideas y proyectos. Existen aceleradoras e incubadoras a nivel global que adoptan a los proyectos más interesantes y los ayudan a potenciar. El ser aceptado en una de estas aceleradoras es un logro que pocas startups consiguen y que ayudan a validar sus emprendimientos. En Bolivia MinkEdu es un ejemplo de una startup que fue aceptada por una de las mejores aceleradoras de Latinoamérica, StartupChile. TuGerente, por su parte, fue una de las 15 startups escogidas por el programa WeXchange del BID Lab. Adicionalmente aceleradoras bolivianas como Solydes, Pista8 e InnovaUp están estableciéndose como iniciativas locales que apoyan anualmente a alrededor de 30 startups bolivianas a potenciar sus proyectos y proyectar mejor su estrategia.
Otro caso de éxito importante, tal vez demasiado importante, es cuando una startup logra un retorno para sus inversores, el llamado “exit”. Un exit se puede dar a través de una venta total de la startup a otra entidad o mediante una oferta pública de acciones. Si bien ninguna startup en Bolivia ha logrado un exit mediante una oferta pública todavía, Yaigo y NetComidas lograron su exit al venderse a Yummy y PedidosYa respectivamente. Estas ventas exitosas no solo muestran que existen casos de éxito en Bolivia, sino también generan equipos de emprendedores exitosos que tendrán mayor facilidad de contar con inversión extranjera en sus siguientes proyectos. Tal es el caso del fundador de NetComidas, quien hoy es fundador de Koban y ya tiene un gran respaldo de inversores con él.
Todos los anteriores ejemplos han logrado que poco a poco fondos internacionales empiecen a ver a Bolivia como un mercado potencial para invertir. Sin embargo, como se mencionó al inicio de este artículo, no solo la inversión es necesaria. El gobierno debe estar del lado del emprendedor y generar políticas y regulaciones que faciliten que las startups puedan operar en una etapa temprana. Si bien en este aspecto todavía no hay un gran avance comparándonos con países vecinos, iniciativas como la Cámara Fintech buscan aglutinar a emprendedores, empresarios, y reguladores para defender los intereses de los emprendedores frente al gobierno y abogar por nuevas regulaciones. Adicionalmente, grupos de emprendedores en distintas ciudades son un espacio donde emprendedores pueden conectar entre ellos y acceder a consejos y experiencias de sus pares.
Para finalizar este análisis de nuestro ecosistema, es justo mencionar que este año por primera vez, Bolivia tiene un foro de emprendimiento de renombre regional, VCILAT. Eventos como este, que traerá a más de 10 fondos latinoamericanos de inversión y los conectarán con emprendedores bolivianos, son necesarios para mostrar el trabajo y avance de nuestros emprendedores. En una etapa temprana del ecosistema como la boliviana, son necesarias iniciativas que aglutinen a los emprendimientos del país para buscar avances conjuntos. Quizás un ejemplo de aglutinamiento exitoso es SC Ángeles, el primer grupo de inversores ángeles bolivianos que cuenta con casi 50 miembros interesados en invertir en startups de Bolivia y la región.
Hoy Bolivia todavía no tiene un unicornio, pero poco a poco vamos fortaleciendo nuestro ecosistema y generando potenciales unicornios. Ser emprendedor no es fácil, pero es un camino lleno de aventuras y los que hoy estamos recorriendo esta travesía, podremos decir orgullosos que ayudamos a que Bolivia empiece a ser reconocido en nuestra región como un país de emprendedores.
Fotografía: «PasanaQ fue escogida como uno de los mejores 5 emprendimientos de la Universidad de Oxford en 2022».
